Frase

Frase del mes
Quiero mirarme en el espejo y que me guste lo que veo, Cuesta seis días por semana. Quiero que lleguen los domingos y no vuelva el miedo, Quiero tomármelo con calma.
-Vale la Pena - Paula Mattheus

viernes, 14 de marzo de 2014

Palabras del momento


Ese momento, en el que lo único que quieres es escribir y no sabes qué. Cuando la rabia te hierve por dentro y los celos arañan tu coraza. El qué escribas es lo de menos. El por qué es lo que te mueve a ello.

Escribes palabras con lágrimas cayendo de tus ojos castaños; verdosos al pestañear y limpiar de gotitas la córnea como si de un parabrisas se tratara. Lágrimas de furia, lágrimas de dolor. De celos, de odio. Quizá, lo que te impulse por encima de todo eso, el mismo miedo.

Miedo. Miedo a que las cosas no sean como quieres. Miedo a que lo sepa y no lo considere más que una chorrada cualquiera. Miedo a que no comparta el sentimiento proferido. Terror a que alguien más sepa de él. De sus grandes cualidades y encantos. Miedo a que otra le merezca más. A que él quiera más.

Estas veces que el miedo, el dolor, la rabia, la indecisión te abordan no sabes reaccionar. Cuántas veces habrás pasado por esta situación. Cuántas veces te habrás prometido aprender a superar, a olvidar, y a dejar de llorar.

Y aquí estás, amiga mía. Aquí se descubre la verdad. La verdad es que es un obstáculo que debes pero no puedes saltar. La verdad es que aquí te encuentras, escribiendo palabras que ni si quiera vas a repasar. Palabras salidas de esas lágrimas. Palabras que no consiguen explicar tu verdadero sentimiento.

Escuchando música escribes estas palabras que aquí quedarán. Palabras salidas de la emoción. Del momento de creación, sin búsqueda alguna de calidad literaria. Solo son palabras, que aunque no los expresen, te ayudan a sacar de ti esos sentimientos.


Más tarde volverás a llorar. En seguida recordarás y caerás. Pero mírate ahora. Mira las letras que tienes ante ti. ¿Lo ves? Ahora, al menos las ves. Ya no son borrones en una pantalla. Ahora ves letras, palabras y oraciones. Ahora la canción ha cambiado. Tecleas más deprisa, piensas más ágilmente. ¿Lo notas? Ahora tienes una pequeña sonrisa en esos finos labios. Lloras de nuevo, sí. Pero navega dentro de ti. ¿Descubres eso? Ahora ya no pesa tanto el dolor.

Te da igual lo que digan. Este es tu momento. Estas tus palabras. Esta, tu emoción.

Ahora vuelve a mirarte. Sonríes.

K.H.R.L.